Como vimos en el apartado anterior, las acciones se pueden valorar según distintos criterios el valor nominal o el valor cuando se constituyó la empresa, el valor contable donde se tiene en cuenta la evolución de la empresa a lo largo de los años, y si ha aumentado o disminuido su patrimonio y el valor de mercado o el valor al que se compra o se vende una acción en un momento determinado, si cotiza en bolsa, el valor de mercado es el valor bursátil.

Si la empresa quiere ampliar capital social, es decir quiere aumentar el número de acciones o títulos que forman la empresa, debe decidir qué precio le pone a esas nuevas acciones que se van a ampliar, sin que los que son antes de la ampliación accionistas (antiguos accionistas) pierdan valor en la operación porque esas acciones, ya no valen lo que indican las escrituras o lo que valían en la constitución, sino que pueden haber ganado valor con el crecimiento de la empresa o perdido valor si la empresa va mal y ha tenido varios periodos con pérdidas.
Además de compensar la pérdida de valor de las acciones, en la ampliación se debería permitir a los accionistas mantener la proporción de capital que tuvieran antes de la ampliación, porque sino estarían perdiendo poder en la empresa.
Por ejemplo: supongamos que una empresa tiene un capital social formado por 10.000 acciones de 5€ de capital social, pero que en bolsa se pueden vender a 12€. Si se emiten 5.000 nuevas acciones con un valor nominal de 5€, nadie compraría esas acciones en bolsa, sino que se esperarían a la ampliación, por lo que el valor de las acciones totales bajaría y eso sería perjudicial para la empresa y para el antiguo accionista.
Si la empresa anterior no cotizara en bolsa pero el valor contable de la acción fuera 12€ porque la empresa ha ido creciendo con las reservas generadas con los beneficios que ha ido teniendo, es decir el valor de la empresa es de 120.000€, de los que solo 50.000€ es capital social y ahora las 5.000 nuevas acciones se venden a 5€, es decir hay una ampliación de 25.000€ de capital, al hacer el valor contable de las acciones después de la ampliación, este da 9,67€, estas habrán ganado valor para los nuevos accionistas y perdido para los antiguos, lo cual es injusto.
Además en este mismo ejemplo si un antiguo accionista tenía la mitad de las acciones (5.000 de 10.000), si no compra ninguna acción después de la ampliación pasará a tener un tercio de las acciones (5.000 de 15.000) por lo que hará perdido poder en la empresa.
Es por ello que aparece la figura de los Derechos de suscripción, que son necesarios para comprar una nueva acción, que permiten al antiguo accionista comprar la misma proporción de nuevas acciones de las que tenía antes de la ampliación. (En el ejemplo el 50% de las nuevas acciones, es decir 2.500 acciones) y si no las quiere comprar puede vender estos derechos a quién este interesado en comprar las nuevas acciones compensando así la pérdida de valor de las antiguas acciones con la ampliación.
EJEMPLO
Veamos en el ejemplo anterior cuánto valdrían los derechos de suscripción, para ello vamos a sacar los datos:

Lo primero que vamos a hacer es calcular cuántas acciones antiguas hacen falta para suscribir una nueva, para ello hacemos la proporción:

En este caso hacen falta 10.000/5.000=2 acciones antiguas por cada nueva. Si se suscriben todas la proporción de poder de cada socio se mantendrá. Pero los socios pueden no querer comprar nuevas acciones y pueden vender los títulos.
¿Cuál será el precio de cada derecho de suscripción?
Lo primero que se hará es calcular el valor teórico de las nuevas acciones, para ello calcularemos el valor teórico total de las acciones y se dividirá entre el número de acciones:

En nuestro ejemplo:

El accionista tenía unas acciones que valían 12€ pero después de la ampliación van a valer 9,67€, por lo que derecho de suscripción debe valer la diferencia entre el valor teórico antes y después de la ampliación:

Supongamos ahora un accionista que tiene 200 acciones antiguas que quiere comprar las acciones que le corresponden, ¿Cuánto pagará?
Con 200 acciones puede comprar 100 nuevas, pagará 5€ por cada nueva acción, ya que tiene los derechos de suscripción necesarios para comprar 100 acciones. Por lo que pagará 500€.
Si no las quiere suscribir vendería esos 200 derechos de suscripción por 2.33€ cada uno lo que le hace un cobro de 466,67€ que compensa la pérdida de valor de las antiguas acciones.
Por último si quisiera comprar 150 acciones nuevas, pues pagaría 5€ por cada acción y tendría que comprar 100 derechos de suscripción que le permitan comprar las 50 acciones nuevas para las que no tiene derechos lo que hace un total de: 983,33€
Si un nuevo accionista quiere comprar 1.000 acciones, le costarán 9666,67€ de los cuales 5000 serán valor nominal y 4666,67€ irá a remunerar los derechos de suscripción.
Puedes ver el vídeo del apartado:
O puedes hacer el siguiente edpuzzle, accediendo a la plataforma:
Además puedes acceder a los siguientes problemas resueltos en vídeo: